La mejor manera de descubrir lo oculto en lo ya muchas veces contado, es contarse, es describirse, es recordarse. El escritor y periodista Jesús Ruiz Mantilla decidió tomar el camino de las memorias de su propia vida, para componer una ficción que habla de la historia española reciente, ese relato que la televisión va convirtiendo en mito y que conocemos como Transición.
La historia de Chucho, un evidente alter ego del autor, sucede en dos planos: el del pasado donde cuenta su vida en el hotel que regentaba su familia, y el del presente, donde desde su adultez recuerda y habla de la realidad actual.
La vida pasada en el hotel sirve para describir una serie de huéspedes del todo variopintos, la realidad política del fin de la dictadura franquista, y el puente del niño protagonista entre su infancia y su adolescencia. Entre la adoración por la música de Rock, a Chucho se le colará el atentado a Carrero Blanco, la llegada de Cruyff, las tentaciones de las drogas y las sirenas mágicas del sexo.
La voz que habla desde el presente será la de una potencia descarnada. Mostrará a un Chucho ciertamente desesperanzado de las ilusiones juveniles. Un amor que le complica la vida, y una profesión que lo lleva de viaje y lo hace así un analista con visión panorámica del mundo, le hará ofrecer una visión pesimista del mundo, adornada con una magistral lucidez sarcástica. Por momentos, la desazón roza una cadencia apocalíptica, basada en críticas políticas inspirada en las situaciones de diferentes países y regímenes y personajes del poder como el Rey Juan Carlos o la ex presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Ruiz Mantilla, quien ha confesado que parte de su infancia vivió en “este” hotel, diseña una lectura en dos niveles, en dos registros, en dos maneras de entender la realidad. Y hay que decir con toda contundencia que el planteamiento resulta atractivo y ciertamente efectivo. Por un lado, la prosa de los pasajes en el hotel llevan el sello de la ilusión de la mirada de un niño, asociado a las ilusiones de una España que soñaba con ser libre y justa. El hotel es un espacio donde se conserva todavía una quimera por el porvenir. El Chucho niño, aún entre disputas familiares y los miedos propios de la edad, camina con la inquietud fantasiosa de los que creen y se sienten protegidos por su entorno. Al Chucho adulto, por el contrario, se le ha venido la realidad encima. Los cambios positivos que presentía que llegarían a su vida personal y a su país, han sido un fraude. En esta contemplación áspera y afilada de la actualidad, la narrativa de esta contundente novela de aventuras interiores y frescos de la situación de hoy, gana un estilo de excelencia literaria.
Un punto a destacar es el uso del humor en las dos puertas que abre esta ficción: tanto para criticar o para componer personajes y describir sus movimientos que van de lo misterioso a lo libidinoso, de lo circense a lo sociológico, la lectura sabe hacernos reír con una sonrisa inteligente en los momentos precisos. Un gran detalle que muchos sabemos agradecer en una novela que se precie de perspicaz.
Jesús Ruiz Mantilla hace en esta novela una perfecta combinación entre la precisión rigurosa del periodismo narrativo, y la calidez teatral de un mundo perdido, al que sólo la literatura puede iluminar con fidelidad. Hotel Transición es una novela modelo para evocar cómo fuimos y asumir una mirada crítica de cómo somos.
_______
Título: Hotel Transición. Autor: Jesús Ruiz Mantila. Editorial: Alianza Literaria . Edición: Papel y Kindle
[amazon kw=B01CD1J0GS]
Zenda es un territorio de libros y amigos, al que te puedes sumar transitando por la web y con tus comentarios aquí o en el foro. Para participar en esta sección de comentarios es preciso estar registrado. Normas: