En busca de la biblioteca perfecta: Los 7 clásicos grecolatinos más votados

Odiseo reconoce a Aquiles entre las hijas de Licómedes, de Louis Gauffier.

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Es complicado y en cierta medida arbitrario establecer una distinción de carácter de género literario entre muchas de las obras candidatas a esta selección, pero hoy en Zenda publicamos, en base a los parámetros establecidos, las que han sido los 10 clásicos grecolatinos más votados por los expertos.

Los dos primeros puestos están ocupados, con abismal diferencia sobre el resto de los candidatos, por las dos obras clásicas de Homero: La Odisea es, no en vano, el libro más votado de todos los seleccionados por los expertos, con un total de 35 votos acumulados; La Ilíada, por su parte, ocupa el cuarto puesto en total con 24 votos en su haber. Esta circunstancia no hace más que subrayar el hecho de que con Homero se inauguró, además del sentido imitativo de la epopeya que definiría Aristóteles en su Poética, el propio corpus canónico de la literatura universal.

Para llegar al tercer puesto tenemos que irnos hasta los Diálogos de Platón, reunidos en forma de obra única, que ha recibido un total de siete votos, los mismos que La Eneida de Virgilio, que vendría a ser la primera obra del periodo romano en el ranking. No es preciso irse de Roma para encontrarnos con la que sería la quinta clasificada, la Metamorfosis de Ovidio, poeta contemporáneo del propio Virgilio —ambos vivieron, de hecho, durante el periodo que fijó el eje de nuestro calendario: nacieron antes de Cristo, murieron después—.

Con 3 votos se encontrarían, ocupando ambas obras el sexto y séptimo puesto, la Historia de la guerra del Peloponeso, de Tucídides; y una de las más importantes tragedias griegas: la Antígona de Sófocles. 

El resto de clásicos grecolatinos en competición, todos ellos con dos votos recibidos por los expertos, son: la Ética a Nicómaco, de Aristóteles; la Anábasis, de Jenofonte; De la naturaleza de las cosas, de Lucrecio; las Meditaciones de Marco Aurelio; las Vidas paralelas de Plutarco; los Poemas de Safo —la única mujer incluida en esta nómina concreta—; las Cartas a Lucilio de Séneca; Edipo rey, de Sófocles; la Vida de los doce césares, de Suetonio; y las Bucólicas de Virgilio.