Suele decirse que la profesión de escritor es vocacional. Pero las vocaciones pueden cambiar o ser tardías. Como le pasó a Arantza Portabales. Porque su vocación era saber de leyes, quería estudiar Derecho. Y eso hizo. La vocación literaria llegó mucho más tarde, pasada la frontera de los 40. Y aunque ahora escribe novelas, comenzó elucubrando microrrelatos. Del microrrelato pasó a la novela por entregas para La Voz de Galicia, continuó con la novela más intimista para pasar a la negra. Todo un periplo literario en menos de una década.
Acaba de publicar Sobreviviendo (Lumen, 2022), aunque en realidad esta es la novela que publicó por entregas en el periódico, entonces solo lo hizo en gallego.
Con Arantza charlamos sobre microrrelatos, sobre qué es literatura y qué es novela negra, también sobre la creación de personajes.
«No hay nada más maravilloso que, para meter a un lector dentro de una novela, plantearle al principio unos personajes tremendamente estereotipados. Y todavía hay algo mejor, destruirle el estereotipo a medida que lee la novela».
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