Bofetones aparte, los Oscars de este año —vistos e inmediatamente olvidados— dejan para el supuesto recuerdo un puñado de interesantes películas que quizá quieras ver. Te dejamos una lista donde comentamos e indicamos dónde ver ahora mismo cada una de las nominadas a Mejor Película, acompañada de un leve comentario opinativo que no nos has pedido pero que, de todas formas, quizá quieras leer.
CODA, la no tan inesperada ganadora (empezó a tomar ventaja días antes de la gala, y ya sabemos lo que le gusta la Academia integrar minorías) es un amable film que nunca jamás debería haber atesorado un Oscar a la mejor película, pero así están las cosas. Remake de la francesa La familia Berlier, la película narra la historia de Ruby (Emilia Jones, de la serie Locke y Key, de Netflix), la hija de un matrimonio sordo que trata de hacerse sitio en el coro de su centro educativo. Es una película divertida y encantadora, tierna, pero impropia de un galardón como el que nos ocupa. Pese a ser una obra con el sello de Apple TV+, y así se ha distribuido en otros países, en España no ha ido a streaming, sino a cines de la mano de Tri Pictures, y es en salas donde puedes verla ahora mismo.
El poder del perro es una película de Netflix, donde la tienes disponible desde noviembre. La película se hizo con el premio a la Mejor Dirección, para Jane Campion (El piano) pero podría catalogarse como la gran perdedora de una noche donde primaron los premios bien repartidos. Este western en clave de thriller de esos de deconstruir estereotipos, en este caso de lo que ha venido a llamarse como masculinidad tóxica, tiene algún giro insospechado y una estupenda interpretación de Benedict Cumberbatch, sin olvidar a un cambiadísimo Kodi Smit-McPhee (el hijo de Viggo Mortensen en la inolvidable La carretera).
Drive My Car, ganadora del premio a la mejor obra en lengua no inglesa (pero presente también como Mejor Película) se estrenó en febrero en salas de cine y el 8 de abril llega a Filmin. Una adaptación de Murakami que ha consagrado a su director, Riusuke Hamaguchi, como la sensación del momento, y una película sobre la soledad, la redención y los golpes del destino (también sobre Chéjov) tratada con rigor. El ritmo dilatado de la película se sostiene gracias a su protagonista, Hidetoshi Nishijima, y sobre todo ese estupendo Saab 900 turbo recorriendo las solitarias calles y paisajes de Hiroshima.
Belfast se estrenó en cines a finales de enero, y es en salas donde todavía puedes acceder a ella. Qué oportunidad de premiar a una buena película de compromiso ha perdido la Academia. Porque ya que a West Side Story ni se la esperaba, y El poder del perro era de su odiada y temida Netflix, la de Kenneth Branagh podría haberse erigido como la siempre saludable opción de en medio. No ha sido posible, con el británico haciéndose con el premio a guión original, pero ni siquiera a dirección por su extraordinaria fabulación de su infancia irlandesa, o con la no menos fabulosa Judi Dench pudieron subir al escenario.
El método Williams, estrenada en cines hace pocas semanas, está ya en HBO Max. La película que le ha ganado su primer Oscar a Will Smith (y a Chris Rock su primer bofetón en público) es la historia del apodado King Richard, el padre de Venus y Serena Williams. Un retrato convencional y entretenido de la clásica y controvertida figura del americano soñador y luchador con todos los elementos del sistema (y de la pista de tenis) en contra. La película dulcifica al máximo a su protagonista, pero vista con ojos abiertos permite ahondar en las fracturas y oscuridades del personaje. Smith, por supuesto, hace otra de sus interpretaciones tan ególatras como carismáticas.
El callejón de las almas perdidas se estrenó a finales de enero en cines y ya la puedes ver en Disney+. La película de Guillermo del Toro, galardonado previamente por La forma del agua, mezcla el imaginario del director mexicano con la negrura de la novela de culto de William Lindsay Gresham, publicada en 1946. Nunca tuvo ninguna oportunidad de ganar, y desde luego muchos han discutido su condición de película afinada, pero lo cierto es que su factura es exquisita y su apuesta por un cine clásico resulta consoladora para el espectador adulto que ha dado las salas de cine por perdidas. Te hablamos de ella aquí.
West Side Story salió en diciembre del año pasado en salas y ya la tienes en Disney +. La nueva adaptación la mítica obra de Bernstein y Sondheim pasará a la historia por ser el gran (y único) musical de Spielberg. Premiada con el Oscar a la mejor actriz de reparto para la extraordinaria Ariana DeBose por su papel de Anita, la película es una lección de puesta en escena del director de Tiburón y E.T. Una demostración del poder del cine en manos de un cineasta que ya pertenece a la historia (por mucho que algunos se lo sigan discutiendo).
No mires arriba, de Netflix (ya sabes, por tanto, dónde verla) no estaba mencionada en la categoría de Mejor Director, lo que ponía en contra de todas las apuestas a la comedia de Adam McKay. La sátira de la humanidad haciendo frente a un meteorito, metáfora del cambio climático, ha sido la película divisiva de la temporada. Protagonizada por Leonardo DiCaprio, Jennifer Lawrence y media decena de estrellas más, la abotargada película de McKay resultó divertidísima a un amplio sector del público, y aburridísima y manipuladora a otros.
Dune es la película más premiada de la gala, con cinco premios pero en el ámbito técnico. Y no porque no pudiera haberse hecho con más estatuillas, si no fuera por la manía de la Academia de no nombrar a mejor director al autor de una obra nominada a mejor película (y, lógicamente, su reticencia académica en premiar cualquier cosa que no sea un drama). La carísima adaptación de la obra de Frank Herbert está ya disponible en discos y en HBO Max, y es probablemente el único título del grupo que se podría encuadrar en algo parecido a un “éxito de taquilla”.
Licorize Pizza salió en cines, y en abril de 2022 es donde todavía puedes (y deberías) verla. La comedia ligera de Paul Thomas Anderson, basada en ciertos recuerdos de californiana y relajada juventud, ha supuesto la entrada en el panorama de Cooper Hoffman (hijo de su actor fetiche, el fallecido Philip Seymour Hoffman) y la excelente Alana Haim. Las mejores secciones de este romance de verano son las protagonizadas por Sean Penn (como un trasunto de William Holden) y un hilarante Bradley Cooper como el productor y pareja de Barbra Streisand, Jon Peters.
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